Un juzgado de lo Mercantil de Barcelona ha emitido un fallo que marca un hito en la lucha contra la piratería en el ámbito del fútbol, permitiendo acciones legales directas contra los usuarios que consumen contenido pirata.
Esta decisión representa un cambio significativo en la estrategia contra la piratería, ya que hasta ahora las medidas se centraban principalmente en perseguir a las redes criminales y establecimientos públicos implicados en esta actividad ilícita. Anteriormente, la acción se limitaba a bares y restaurantes que transmitían partidos de fútbol sin autorización, pero ahora se extiende al consumidor residencial, aquel que accede al contenido pirata desde su propio hogar.
El fallo judicial requiere que los proveedores de servicios de internet informen a LaLiga sobre los usuarios que se conectan a servidores pirata, proporcionando información como la dirección IP asignada al usuario, el nombre y apellido del titular del contrato de acceso a internet, la dirección postal asociada a la instalación de la línea y a la facturación, así como el documento de identificación (DNI, NIE).
Los operadores obligados a suministrar esta información incluyen a Vodafone, Orange, MásMovil, Digi y Movistar.
Con la implementación de este fallo, se espera que comiencen a enviarse reclamaciones a los domicilios particulares de los usuarios por parte de LaLiga, en un esfuerzo por combatir la piratería de IPTV.
Este paso refuerza los esfuerzos por proteger los derechos de propiedad intelectual en el ámbito deportivo, estableciendo un precedente importante en la defensa de los derechos de transmisión y combatiendo el acceso ilegal a contenidos deportivos.
