Con un abogado y más de 150.000 euros
El lateral está a punto de cumplir un año en prisión a la espera del juicio que empezará el próximo mes
Dani Alves, quien ha pasado cerca de un año en la cárcel desde su ingreso el 20 de enero de 2023 en la prisión Brians 2 de Barcelona, enfrenta un próximo juicio que marcará el fin de su período de prisión preventiva. La acusación en su contra proviene de una joven de 23 años, quien alega haber sido agredida sexualmente por el futbolista en el baño del reservado de la discoteca Sutton.
El juicio está programado para iniciar el 5 de febrero a las 10:00 horas y se extenderá también los días 6 y 7 del mismo mes, según lo anunciado por la Audiencia de Barcelona. La presunta víctima busca una indemnización de 150.000 euros, argumentando secuelas «físicas y psicológicas» como resultado de la supuesta violación en la discoteca. Además, esta acusación particular está solicitando una pena de doce años de cárcel para el futbolista brasileño.
En medio de este proceso legal, Dani Alves ha buscado apoyo tanto financiero como legal, y según reportes de medios brasileños, se ha dirigido a su amigo y excompañero, Neymar, para obtener ayuda. El medio brasileño UOL informa que el padre de Neymar ha transferido fondos para respaldar la defensa de Alves. Este dinero se ha destinado a pagar una multa denominada «indemnización atenuante del daño causado» de 150.000 euros a los tribunales españoles, una suma que podría influir en la posible reducción de la pena en caso de condena.
Además, en el contexto de este complicado proceso legal, Dani Alves ha tomado medidas específicas en la gestión de su situación. Designó como apoderado a Gustavo Xisto, uno de los representantes legales más antiguos de las empresas del padre de Neymar, apartando a Dinorah Santana, su exmujer, de la gestión de su patrimonio. Estas decisiones evidencian la complejidad y las implicaciones personales que rodean la situación legal de Dani Alves.